La visualización permite reducir el dolor mediante el control de las imágenes que podemos formar en nuestro cerebro. Es una practica que podemos utilizar para ser conscientes de nuestro cuerpo y mente
Los ejercicios de formación de imágenes ejercen su efecto sobre los aspectos emocionales y cognitivos de la experiencia dolorosa, que a menudo son precisamente sus desencadenantes. Las técnicas de visualización para controlar el dolor son muy simples y efectivas, como las dos que sugerimos:
Por la forma Centra tu atención en la sensación de dolor dibujando mentalmente con la máxima precisión su forma y tamaño. Luego imagina que se incrementa el tamaño del dolor exageradamente y mantén durante un tiempo esta imagen en la mente. Cuando te hayas hecho totalmente con esa imagen mental, empieza a imaginar que el tamaño de tu dolor decrece de modo gradual hasta volver a la dimensión original.
Repite los pasos anteriores dos o tres veces más.
Una vez alcanzado el tamaño original del dolor, prosigue el proceso de disminución hasta que desaparezca. Evalúa los cambios producidos en la intensidad del dolor.
Por el color Centra tu atención en la sensación de dolor dibujando mentalmente con la máxima precisión su forma y tamaño. Imagina que el área de dolor es rojo intenso y el resto del cuerpo es azul.
Luego invierte los colores: cambia el color rojo intenso del área de dolor por el color azul recreando una sensación refrescante y tranquilizante. Cambia el color azul del resto del cuerpo por el rojo experimentando una sensación agradablemente cálida que inunda todo el cuerpo. Cambia ahora el color rojo por el azul y siente todo el cuerpo completamente lleno de un color azul refrescante con efecto tranquilizador. Evalúa los cambios producidos en la sensación del dolor.
Este ejercicio te puede a ayudar a mejorar todos los tipos de dolor.
Te proponemos que veas este vídeo que hemos realizado al respecto.