La reflexología podal se basa en dos principios fundamentales: la existencia de áreas de los pies y de las manos que reflejan todo el organismo, estadas de equilibrio en los que los órganos y partes del cuerpo representados están reflejados, y la estimulación de estas áreas por medio de técnicas manuales, que afecta los órganos reflejados, facilitando su movilización hacia el equilibrio.

La reflexología holística agrega dos principios más: ambos pies representan a la persona en todos sus planos, y el estímulo verbal, mediante preguntas, señalamientos o observaciones, intentan propiciar la conciencia personal de lo que a través de situaciones de vida la persona puede aprender acerca de sí misma.

La reflexología es tanto una ciencia como un arte, dependiendo de la capacidad del terapeuta para observar e interpretar los signos del tratamiento, así como su sensibilidad para efectuar la presión en áreas adecuadas. Esta especialidad humana estimula el desbloqueo energético, favorece la relajación, alivia el estrés, moviliza los impulsos nerviosos y la circulación sanguínea, despierta los mecanismos naturales de depuración, y es un camino de evolución al propiciar la expansión de la conciencia.

La reflexología holística estimula el desbloqueo energético, promoviendo la relajación y aliviando el estrés. Favorece la transmisión de impulsos nerviosos, la circulación sanguínea y el funcionamiento del sistema inmunológico. Estimula los mecanismos naturales de depuración y es un excelente camino de evolución pues contribuye a la expansión de la conciencia. También favorece la identificación y trabajo de problemáticas latentes y aporta una mejoría en la calidad de vida de la persona de manera integral, actuando sobre el aspecto orgánico, el desarrollo de la capacidad de cambio, la toma de conciencia de sentimientos, emociones y sensaciones, y la conexión con valores trascendentes.

 

¿Qué es la reflexoterapia podal y sus efectos?

– Desbloqueo energético: el estímulo reflexológico busca desbloquear la energía.

– Relajación y alivio del estrés: la reflexología produce endorfinas que alivian la tensión, calman el dolor y elevan la producción de defensas del cuerpo.

– Movilización neuroendocrina e inmunológica: el estímulo mecánico promueve una mayor comunicación neuronal y estimula la producción de hormonas.

– Mecanismos naturales de depuración: la reflexología colabora promoviendo la depuración del organismo.

– Problemáticas latentes: la información brindada por los pies permite trabajar problemáticas aún no manifestadas.

– Camino de evolución: la reflexología promueve una mejor calidad de vida, facilita la toma de conciencia de sentimientos y emociones, y incita a una mayor conexión con valores trascendentes.